Juanetes

Los tres principales problemas son dolor, dificultades para calzarse y problemas estéticos.

El juanete juvenil habitualmente no es doloroso, pero sí ofrece inconvenientes para la adaptación del calzado, mientras que el juanete del adulto presenta los tres problemas.

El dolor y la inflamación, que empeoran con el movimiento, son dos síntomas de los juanetes que se localizan bien en la zona en que se une el dedo con el resto del pie, o directamente sobre el juanete. Otras veces se presenta en la cara plantar (zona de debajo del pie) de la articulación, en la cara plantar del antepié, o en todo el pie.

El dolor en la parte interna suele deberse a callosidades dolorosas situadas sobre el juanete y, sobre todo, a la inflamación. El dolor plantar está relacionado muchas veces con problemas articulares, como la artrosis.

Cuando se utilizan zapatos de tacón alto que fuerzan el dedo en una posición crónicamente extendida, o cuando un hallux valgus o juanete empuja al segundo dedo o le desvía en martillo, las fuerzas extensoras mantenidas durante largo tiempo acaban estirando y adelgazando la cápsula de la articulación del segundo dedo, que también termina viéndose afectado.

Estas diferentes variedades de presentación y localización del dolor obligan al especialista a explorar no solo el antepié, sino también el pie en su totalidad, en vez de concentrarse exclusivamente en la deformidad del primer dedo.

Las causas de la desviación suelen ser la artritis, la artrosis, la herencia genética o, en definitiva, cualquier osteopatía deformante. Además, con las nuevas tendencias de calzado, cada vez más estrecho y menos anatómico, existe también la necesidad de proteger también el quinto dedo, ya que muchas personas sufren dolor en esta zona. En Hebifeet™ encontrarás el llamado Protector del Juanete de Sastre, ideal para evitarlo.

Además de usar un calzado poco adecuado o de haber sufrido algún traumatismo, la causa principal de los juanetes suele ser la forma en que pisamos, por lo que los huesos se van deformando como consecuencia del peso del cuerpo y el movimiento al que se le está sometiendo. Esta pisada anómala normalmente tiene componentes genéticos.

Para evitar esto, no hay nada como los protectores para juanetes, ya que protegen la zona frente a rozaduras y presiones excesivas, reduciendo el dolor y protegiendo la piel. En HerbiFeet disponemos de diversos tipos de protectores, tanto de gel como de silicona, suaves, cómodos y fáciles de colocar. No te quedes sin estos elementos fundamentales e imprescindibles para combatir los Hallux Valgus.

La primera medida a tomar cuando descubrimos la presencia de juanetes en los pies o la desviación del primer dedo del pie hacia fuera, es el cambio del tipo de zapato por uno ancho que permita la distribución de los dedos sin mayor problema.

Para reconducir la desviación del dedo producida por los juanetes en los pies, se pueden usar órtesis de gel para proteger el juanete del roce, o dispositivos para separar los dedos.

Si el juanete empeora causando una deformación severa y produciendo dolor, puede ser necesario recurrir a una cirugía para realinear el dedo y eliminar la prominencia ósea.

Ventajas de los productos para juanetes

Reduce el dolor y la inflamación.

Protección de las cabezas metatarsales y del juanete.

Evita que se formen durezas y callosidades.

Ayuda en la alineación de dedos.

Disminuye la fricción y la presión en el Hallux Valgus.

Ofrece protección en helomas y roces interdigitales.